S.A.R. Infante don Luis, príncipe de Baviera tomó posesión de la presidencia del Cuerpo tras la muerte de su padre S.A.R. el Infante don Fernando, que la había ostentado durante cuarenta y nueve años.
Se designó una comisión, nombrada en junta general el 7 de julio de 1958, para visitar al Jefe Supremo en Estoril. Fueron recibidos por los Condes de Barcelona el 6 de diciembre de ese año, el marqués de Sales, don José María Rivero de Aguilar y don Fernando García de Vinuesa, secretario de la Corporación. En Portugal se les unieron el Grande de Servicio, marqués de Casa Tilly, el secretario del gabinete diplomático don Juan de Tornos y Espilius y las damas marquesas de Molina y de Sales. La Comisión propuso al Jefe Supremo la posibilidad de nombrar a uno de los hijos del Infante fallecido, dignándose nombrar el Augusto Señor al Infante don Luis.
S.A.R. el Infante Presidente don Luis con manto y cordones privativos del Real cuerpo. (Archivo: R.C.N.M.) |
En esa audiencia se ofreció a la Condesa de Barcelona la insignia del Cuerpo que había usado Doña Isabel II, donada por el Infante don Fernando, y que la Junta acordó que a perpetuidad la ostentasen las esposas del Jefe Supremo. Ademas se entregaron las insignias privativas del Real Cuerpo al Conde de Barcelona y a S.A.R. el Príncipe de Asturias.
S.A.R. el Infante don Luis recibió la presidencia el 7 de enero de 1959 de su hermano el Infante don José Eugenio, que ostentaba la representación del Jefe Supremo. El Ayuntamiento de Madrid ofreció a Su Alteza Real el 21 de enero una recepción el Salón de Goya con motivo de su nombramiento.
Recepción al Infante Presidente en el Ayuntamiento de Madrid -1959- (Archivo: R.C.N.M.) |
Su presidencia fue también larga y de feliz memoria, 24 años, hasta su fallecimiento en 1983. Bajo su mandato el Real Cuerpo vivió importantes momentos de su historia como fueron el nombramiento de Dama Protectora e imposición del lazo a la S.A.R. la Princesa de Asturias Doña Sofía (1962), profundos cambios en nuestros estatutos aprobados por el Jefe Supremo (1968), participación en la misa del Espíritu Santo con la que inauguraba su reinado S,M. el Rey Don Juan Carlos I y el cambio de denominación de la Corporación a Real Cuerpo de la Nobleza de Madrid.